Dary Terrero
Verona, Italia. – Un turista provocó la destrucción casi total de una obra de arte contemporáneo en el museo Palazzo Maffei, al sentarse sobre ella para tomarse una fotografía sin autorización.
El incidente generó indignación tanto en el personal del museo como en la comunidad artística local.
La pieza afectada es Van Gogh Chair, una escultura decorativa creada por el artista italiano Nicola Bolla, compuesta por miles de cristales Swarovski.
La obra no era funcional ni permitía interacción física directa, y su propósito era puramente visual y conceptual.
Todo quedó grabado en video
El momento exacto fue captado por las cámaras de seguridad del museo, que registraron cómo el visitante se acercó a la obra, se sentó en ella con intención de posar para una foto y terminó derribándola.
Al caer, la estructura se fragmentó en múltiples piezas, dañando gran parte de los cristales que la recubrían.
El museo calificó el suceso como una “pesadilla”, según declaraciones de su directora, quien además lamentó la falta de respeto hacia las normas básicas de comportamiento en espacios culturales.
Obra fue restaurada
Pese a los daños severos, el equipo de conservación del Palazzo Maffei logró restaurar la pieza.
Sin embargo, expertos aseguran que parte de su integridad original se ha perdido, y que la restauración, aunque meticulosa, no puede igualar el valor estético y simbólico previo al accidente.
Nicola Bolla, el autor de la obra, no ha emitido declaraciones públicas, aunque el museo informó que se ha mantenido en contacto con él desde que ocurrió el incidente.
¿Habrá consecuencias legales?
Hasta el momento, no se ha confirmado si el turista enfrentará sanciones legales o administrativas. El museo no ha revelado su identidad, y se desconoce si se trató de un acto imprudente o simplemente ignorancia de las normas del lugar.
La legislación italiana contempla sanciones para quienes dañen patrimonio artístico o cultural, incluso si se trata de piezas contemporáneas.
No obstante, las consecuencias pueden variar dependiendo de la intención, el valor de la obra y si hubo o no advertencias visibles.
Debates sobre el acceso al arte
El incidente reabre el debate sobre la necesidad de reforzar medidas de seguridad en los museos, especialmente en una época donde muchos visitantes priorizan obtener fotos para redes sociales por encima de la contemplación respetuosa del arte.
También ha generado cuestionamientos sobre cómo comunicar de manera efectiva al público las normas de interacción en exposiciones, en especial cuando se trata de obras no convencionales o visualmente “atractivas” para fotografiar.
El Palazzo Maffei ha reiterado su compromiso con la preservación de las obras y recordó a los visitantes la importancia de seguir las instrucciones y señalizaciones dentro del recinto para evitar este tipo de incidentes en el futuro.
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