Dary Terrero
SANTO DOMINGO. – La Federación Dominicana de Comerciantes (FDC), en conjunto con representantes del sector musical afiliados a la entidad, presentó ante el Congreso Nacional un proyecto de ley que busca regular el uso de música a alto volumen en las vías públicas y prohibir su reproducción en zonas residenciales.
La propuesta legislativa fue depositada con el propósito de establecer un marco legal que proteja el derecho al descanso, la convivencia pacífica y el orden público, sin afectar el ejercicio de actividades comerciales y culturales que cumplen con los parámetros establecidos.
Prohibición total en zonas residenciales
De acuerdo con el proyecto, quedaría terminantemente prohibido el uso de bocinas o equipos de sonido de alta potencia en espacios residenciales, sin importar la hora del día.
Esta medida tiene como fin principal preservar la tranquilidad de los hogares, evitando los excesos que por años han generado quejas y conflictos entre vecinos.
Además, se plantea que en zonas comerciales o públicas solo se podrá utilizar música amplificada dentro de horarios específicos y bajo niveles de decibeles previamente determinados por el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Multas y decomisos por incumplimiento
El proyecto establece un régimen de sanciones que incluye multas económicas, decomiso de equipos de sonido y hasta suspensión de licencias comerciales para los negocios reincidentes.
También contempla la actuación coordinada entre la Policía Nacional, los ayuntamientos y Medio Ambiente para garantizar su cumplimiento.
Los comerciantes que respaldan la iniciativa afirman que no se trata de una medida contra la música, sino de una acción necesaria para frenar la contaminación sónica, especialmente en sectores donde la música a alto volumen se ha convertido en una fuente constante de conflictos, accidentes y problemas de salud.
Apoyo de sectores artísticos y comunitarios
Aunque el proyecto fue introducido por una organización comercial, también cuenta con el respaldo de agrupaciones musicales que aseguran que esta legislación puede dignificar su oficio, delimitando claramente los espacios para presentaciones artísticas formales y evitando que la informalidad afecte su imagen.
Por otro lado, juntas de vecinos de distintos puntos del país han expresado satisfacción por la iniciativa, pues, según indican, la música descontrolada ha deteriorado la calidad de vida en numerosos barrios.
El proyecto será revisado por una comisión bicameral, que convocará vistas públicas para escuchar a distintos sectores sociales antes de emitir un informe favorable o desfavorable para su conocimiento en el hemiciclo.
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