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Por: América Pérez (Magíster en Diplomacia y Derecho Internacional)
En la actualidad, República Dominicana enfrenta desafíos cruciales para sostener y dinamizar su crecimiento económico y social. Entre los temas estratégicos para consolidar un desarrollo sostenible se encuentra la migración. Lejos de ser vista como una problemática a resolver, la migración puede ser una herramienta poderosa para fortalecer el país en sectores claves como la tecnología, la agricultura, el turismo, y la salud. Pero, ¿qué tipo de migración necesitamos para impulsar el desarrollo?
En primer lugar, es esencial que se incentive una migración calificada. La demanda de especialistas en tecnología y comunicación es cada vez mayor y crucial para una República Dominicana más competitiva. Países como Estados Unidos y varios de la Unión Europea ya están acogiendo a migrantes calificados en áreas de ingeniería, programación, y manejo de datos. Adoptar un enfoque similar permitiría al país desarrollar un entorno digital robusto, impulsado por una fuerza laboral bien entrenada en habilidades críticas para la economía global.
Por otro lado, el sector agrícola, esencial para el suministro de alimentos y la economía local, también necesita de migrantes capacitados. La falta de personal cualificado en técnicas avanzadas de cultivo y producción sostenible afecta la competitividad agrícola nacional. Promover la entrada de trabajadores capacitados en prácticas de agricultura sostenible, manejo de recursos y tecnología agrícola podría mejorar significativamente la producción local, convirtiéndola en un sector más eficiente y menos dependiente de factores externos.
En el sector turístico, una de las principales fuentes de ingresos, la migración también puede jugar un papel fundamental. La diversidad cultural y la profesionalización de servicios requieren de personas que aporten innovación y experiencia en la gestión hotelera, actividades de ecoturismo, y desarrollo de nuevas ofertas para los visitantes internacionales. La llegada de expertos en estas áreas puede enriquecer la oferta turística dominicana, agregando valor y atrayendo nuevos mercados.
Finalmente, el área de la salud necesita con urgencia de migrantes especializados que puedan ayudar a mejorar los servicios médicos y de atención. La experiencia de profesionales en medicina, enfermería, y atención de emergencias puede fortalecer el sistema de salud dominicano, brindando una cobertura más integral y especializada.
Para que esta migración impulse el desarrollo, las autoridades dominicanas deben aplicar políticas migratorias proactivas y bien estructuradas. Esto implica crear vías legales y transparentes de entrada para estos profesionales, así como proporcionar oportunidades para su integración y capacitación continua. Además, debe hacerse un esfuerzo para que esta migración calificada también beneficie a la población local, con programas de transferencia de conocimientos y formación.
La migración que necesita República Dominicana es una migración planificada y estratégica, orientada a satisfacer las demandas de sectores clave para el desarrollo.
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