Dary Terrero
El gobierno desplegó un amplio operativo de seguridad en San Francisco de Macorís tras el llamado a huelga de organizaciones sociales y populares.
Movilización de efectivos
Más de mil agentes de la Policía Nacional y militares fueron enviados a distintos puntos estratégicos de la ciudad.
Su objetivo es prevenir disturbios y garantizar la seguridad de los ciudadanos durante la jornada de protestas.
El Comando Conjunto Unificado informó que los efectivos están equipados con vehículos, motocicletas y equipos antidisturbios.
También se establecieron retenes en las principales vías de acceso.
Reacciones ante el operativo
Los convocantes de la huelga denunciaron que la militarización busca intimidar a la población.
Aseguraron que la protesta es legítima y responde a reclamos por mejores servicios básicos, reducción de la criminalidad y cumplimiento de promesas gubernamentales.
Por otro lado, comerciantes y residentes expresaron su preocupación por posibles enfrentamientos.
Algunos negocios decidieron cerrar como medida preventiva.
Exigencias de los manifestantes
Los organizadores demandan la terminación de obras inconclusas, mejoras en el suministro de agua potable y electricidad, así como la reducción del costo de vida. También exigen justicia en casos de abusos policiales.
Hasta el momento, las autoridades no han informado sobre incidentes graves, aunque se han registrado algunos altercados menores en zonas específicas.
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