La ministra de Interior y Policía, Faride Raful, planteó este martes que los motoconchistas en todo el país deberán estar debidamente registrados y portar chalecos visibles, como parte de una estrategia nacional para regular el uso de motocicletas y mejorar la seguridad ciudadana.
Durante su intervención en el Primer Foro Nacional sobre el Uso Responsable de las Motocicletas, Raful urgió a establecer controles más rigurosos, especialmente en provincias con alta circulación de motocicletas como el Gran Santo Domingo, el Distrito Nacional, Santiago, La Vega y San Cristóbal.
Propuesta de un plan integral
La funcionaria explicó que la regulación no puede limitarse a operativos esporádicos, sino que debe incluir acciones coordinadas entre prevención, fiscalización, educación vial y un sistema de registro obligatorio de motocicletas y conductores.
Insistió en que los motoconchistas deberán usar chalecos identificables con su número de registro, lo que permitirá a las autoridades rastrear y organizar el sector informal del transporte en dos ruedas.
Este planteamiento responde al creciente uso de motocicletas como medio de transporte y, en muchos casos, como instrumento para cometer delitos, lo que ha generado preocupación en la ciudadanía.
Control en zonas críticas
Faride Raful señaló que el mayor foco de regulación será en las zonas de mayor densidad urbana, donde el uso de motocicletas representa tanto una solución de movilidad como un problema de orden público.
Indicó que el Gran Santo Domingo, Santiago, La Vega y San Cristóbal concentran la mayoría de los incidentes y delitos asociados al uso irregular de motocicletas.
También se refirió a la necesidad de capacitar a los motoconchistas y crear una base de datos actualizada que permita verificar en tiempo real si un conductor está habilitado para operar.
Trabajo conjunto entre instituciones
Raful hizo un llamado a los ayuntamientos, la Dirección General de Tránsito y Transporte Terrestre (DIGESETT), el Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (INTRANT), y la Policía Nacional para unir esfuerzos en la ejecución de esta política.
Además, exhortó al Congreso Nacional a apoyar las reformas legales necesarias para hacer viable un sistema de regulación más estricto y moderno.
Destacó que este enfoque no busca criminalizar el uso de motocicletas, sino ordenar y proteger a quienes las utilizan de forma responsable, así como al resto de los ciudadanos.
Educación y concienciación como ejes clave
La ministra también propuso el desarrollo de campañas educativas orientadas a crear conciencia sobre el uso correcto del casco protector, el respeto a las señales de tránsito y la conducción responsable.
Se prevé la colaboración con escuelas, juntas de vecinos y asociaciones de motoconchistas para impulsar una cultura de legalidad y seguridad.
Según Faride Raful, ordenar el tránsito en motocicletas es un paso imprescindible para mejorar la seguridad, reducir accidentes y combatir la delincuencia en el país.
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