En un esfuerzo por reducir la burocracia y optimizar los recursos del Estado, el Gobierno dominicano decidió eliminar siete instituciones que ya no se consideraban esenciales para la administración pública.
La medida formó parte de una estrategia más amplia de reestructuración institucional para mejorar la eficiencia del aparato estatal.
Eliminación de la Caja de Ahorros para Obreros y Monte Piedad
Entre las entidades suprimidas, se incluyó la Caja de Ahorros para Obreros y Monte Piedad, una institución financiera pública que había quedado obsoleta frente a las actuales necesidades y estructuras del sistema financiero dominicano.
Junto a esta, la Comisión Sectorial de la Reforma y Modernización del Sector Agropecuario también será eliminada, con el objetivo de consolidar las políticas agropecuarias bajo un único organismo.
Otros organismos disueltos
El Consejo Desarrollo Dominicano en el Exterior (Condex), dedicado a los asuntos de la diáspora dominicana, fue otro de los organismos a eliminar.
Su desaparición obedece a la búsqueda de una gestión más centralizada de las políticas hacia la comunidad dominicana en el extranjero, asignando estas funciones a otras entidades.
Asimismo, el Consejo Nacional de Población y Familia dejará de existir.
Las funciones de este consejo se redistribuyeron entre otras instituciones, buscando evitar la duplicidad de esfuerzos en la formulación de políticas de población y familia.
La Comisión Presidencial de Modernización y Seguridad Portuaria también será eliminada, integrando sus funciones en otras áreas del Gobierno encargadas de la seguridad y modernización portuaria.
Reestructuración en sectores específicos
Entre los organismos que desaparecieron estuvo la Comisión Empresarial para el Desarrollo Hipotecario y Fideicomiso, con la finalidad de simplificar la estructura gubernamental en el sector hipotecario.
Por último, la Comisión Internacional, Asesora de Ciencia y Tecnología fue eliminada, con la intención de centralizar las políticas científicas y tecnológicas en un solo organismo.
La eliminación de estas entidades es parte de una estrategia más amplia de reforma del Estado, buscando un Gobierno más eficiente, menos burocrático y más enfocado en las prioridades del desarrollo nacional.