Dary Terrero
En medio del conflicto con las comunidades de Zambrana, Cotuí, la Superintendente de Desarrollo Social y Relaciones Comunitarias de Barrick Gold, Ivette Viloria, aseguró que la empresa enfrenta un desafío clave.
La actual presa de colas está llegando al final de su vida útil, lo que pone en riesgo la continuidad de las operaciones mineras.
La empresa ha planteado la necesidad de construir una nueva infraestructura para el almacenamiento de residuos. De lo contrario, se vería obligada a detener su producción.
Impacto en la producción minera
Según Viloria, la empresa ha trabajado en garantizar la sostenibilidad de sus operaciones. Sin embargo, sin una nueva presa de colas, el procesamiento de materiales no podría continuar.
“La actividad minera depende de una gestión responsable de sus desechos. Sin este espacio, tendríamos que suspender operaciones”, afirmó.
Conflicto con las comunidades
La propuesta de Barrick ha generado rechazo en sectores de Zambrana y Cotuí. Líderes comunitarios han expresado preocupación por el impacto ambiental de una nueva presa y exigen mayores estudios sobre sus posibles efectos.
Organizaciones ambientales advierten sobre riesgos para fuentes de agua cercanas. Exigen garantías de que el proyecto no afectará la calidad de vida de los residentes.
Barrick defiende el proyecto
La minera sostiene que la nueva infraestructura es esencial para continuar sus actividades en República Dominicana. Afirma que se han realizado estudios de impacto ambiental y que se cumplirán todas las normativas vigentes.
Mientras el debate continúa, la empresa busca consenso con las comunidades para viabilizar la construcción de la nueva presa de colas y evitar el cierre de sus operaciones.
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