El cineasta y productor Alfonso Rodríguez sorprendió este jueves con un gesto inesperado de reconciliación al declarar públicamente que pone fin a la confrontación mediática que sostenía con Santiago Matías (Alofoke), figura central de los medios digitales en el país.
La decisión fue motivada por una frase escuchada durante su participación en el pódcast del comunicador Luisín Jiménez, donde se abordó el clima de hostilidad y ataques que impera en algunos espacios de la comunicación actual.
“Este libertinaje en los medios se va a acabar cuando ocurra una desgracia”, dijo Jiménez en tono sereno, pero con firmeza, lo que dejó una profunda impresión en Rodríguez.

Reflexión en familia
Rodríguez explicó que fue en la intimidad de su hogar, tras ver el episodio junto a su esposa e hijas, que entendió la necesidad de detener una espiral de confrontación pública que, según sus propias palabras, no suma y solo desgasta.
“Me llamaron con una sola voz: era momento de detenerse, de bajar la guardia, de cambiar el tono”, relató en una carta pública.
En ese mismo espíritu anunció que retira lo dicho anteriormente sobre una posible agresión física en caso de encontrarse con Matías, dejando claro que no busca ni amistad ni reconciliación personal, sino simplemente respeto mutuo y distancia.

Llamado al silencio y al respeto
El productor de cine manifestó su intención de no volver a mencionar a Santiago Matías ni a ningún miembro de su equipo, y pidió que esa misma decisión sea considerada por el bando contrario.
“Tengo la bandera blanca en la mano, y espero de corazón que ustedes también la levanten”, expresó.
Agregó que si alguna vez sus caminos se cruzan, espera que cada uno tome otro rumbo sin necesidad de interacción.
“A veces, la paz no necesita abrazos; solo respeto y distancia”, concluyó.
Clima tenso en medios digitales
El enfrentamiento entre Alfonso Rodríguez y Santiago Matías había escalado en los últimos meses con declaraciones subidas de tono, amenazas verbales y múltiples menciones en redes sociales.
La decisión de Rodríguez marca un posible punto de inflexión en una dinámica de rivalidad que, de prolongarse, podía derivar en consecuencias mayores.
La comunidad digital ha reaccionado con sorpresa y, en algunos casos, con aplausos por el llamado a la mesura.
Ahora se espera la respuesta de Matías, quien hasta el momento no ha emitido comentarios sobre el gesto de Rodríguez.
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