El Arzobispo de Santiago, monseñor Héctor Rafael Rodríguez, expresó su apoyo a la propuesta del presidente Luis Abinader de proteger la Constitución dominicana.
Evitando así que se realicen modificaciones frecuentes para favorecer intereses personales, como la reelección presidencial.
Durante un encuentro reciente, monseñor Rodríguez destacó la importancia de esta iniciativa, afirmando que siempre había deseado que la Constitución se mantuviera intacta y que no se utilice para beneficios individuales.
Monseñor Rodríguez subrayó que la reforma constitucional es un tema delicado y que debe ser tratada con sumo cuidado.
En sus palabras, la Constitución no debe estar sujeta a cambios cada vez que un presidente desea reelegirse, por lo que este blindaje propuesto es crucial para asegurar la estabilidad política del país.
Respaldo a la propuesta presidencial para evitar cambios continuos
También expresó su esperanza de que la propuesta de Abinader logre concretarse, lo que consideró un avance significativo en la protección de la democracia.
Además de su apoyo al blindaje constitucional, el Arzobispo se pronunció a favor de la reducción del número de diputados, una de las medidas propuestas en la reforma.
Indicó que esta medida podría ser beneficiosa para la economía del país, siempre y cuando los recursos ahorrados se destinen a obras de interés nacional y colectivo.
Sugirió reducir el número de diputados como medida positiva
Según monseñor Rodríguez, la optimización del presupuesto nacional a través de la reducción de diputados es una idea que merece ser considerada seriamente.
El presidente Abinader propuso cuatro puntos clave en su iniciativa de reforma constitucional: limitar la reelección presidencial a dos períodos consecutivos sin posibilidad de una tercera postulación.
Además de consolidar la independencia del Ministerio Público, unificar todas las elecciones en una sola fecha, y reducir el número de diputados.
Estas propuestas buscan fortalecer la institucionalidad y garantizar la transparencia en el ejercicio del poder.
Monseñor Rodríguez concluyó su intervención resaltando la necesidad de que cualquier reforma a la Constitución sea definitiva y no requiera modificaciones constantes en el futuro.
Su respaldo a la propuesta de Abinader refleja un interés común por preservar la estabilidad y la integridad del sistema democrático en la República Dominicana.
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