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El expresidente de México, Felipe Calderón, hizo fuertes declaraciones respecto a la situación política de Venezuela, calificando al país sudamericano como un “narcoestado”.
Durante su participación en el World Law Congress, celebrado en Santo Domingo, Calderón señaló que esta condición explicaría la negativa del presidente Nicolás Maduro y de los altos mandos militares a abandonar el poder.
El evento internacional fue organizado por la World Jurist Association y reunió a líderes y expertos en temas jurídicos de todo el continente.
Crimen organizado y política
Felipe Calderón fue parte del panel titulado “El crimen organizado transnacional y su impacto en la región americana”.
En su intervención, expresó que el gobierno venezolano ha sido capturado por redes del narcotráfico que lo usan como escudo de protección.
Esto, según él, convierte al Estado venezolano en un mecanismo para mantener operaciones ilícitas con total impunidad.
De acuerdo con el exmandatario mexicano, esta situación es un obstáculo mayor para una transición democrática en Venezuela.
La resistencia del régimen actual, sostuvo, no se debe solo a cuestiones ideológicas, sino a intereses económicos ilegales.
Temor a represalias judiciales
Calderón explicó que Nicolás Maduro y su círculo cercano temen perder sus privilegios y enfrentar acusaciones a nivel internacional.
Mencionó que abandonar el poder implicaría perder el control sobre los recursos y la protección que otorga el aparato estatal.
Por esa razón, dijo, se aferran con dureza a sus cargos y bloquean cualquier intento de apertura política.
Además, recalcó que los militares juegan un papel clave en el sostenimiento del régimen, pues también están vinculados a estas redes criminales.
Según el exmandatario, esta complicidad entre poder político y crimen organizado representa un grave peligro para la región.
Llamado a la acción internacional
Felipe Calderón pidió a la comunidad internacional tomar acciones más decididas para enfrentar la amenaza que representa el narcoestado venezolano.
Consideró que el silencio o la indiferencia ante estos hechos solo fortalece a los actores criminales.
El expresidente exhortó a los países democráticos de América a fortalecer sus instituciones y cooperación en temas de justicia y seguridad.
Insistió en la necesidad de proteger la legalidad y los derechos humanos en todo el continente.
En su opinión, el crimen organizado transnacional es uno de los mayores retos para la estabilidad democrática en la región.
El impacto regional del narcoestado
Calderón advirtió que la influencia del narcoestado venezolano no se limita a su territorio.
Aseguró que sus operaciones y redes de corrupción afectan a otros países de América Latina.
Esto, explicó, facilita la expansión del crimen organizado y la desestabilización de gobiernos legítimos.
Para el expresidente, enfrentar este fenómeno requiere coordinación internacional y valentía política.
También subrayó la importancia de la sociedad civil y los medios en denunciar estos vínculos corruptos.
Felipe Calderón, Concluyó su participación advirtiendo que el futuro democrático del continente está en juego si no se toman medidas firmes.
Dary Terrero
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